La lucha entre las clinicas dentales locales y las franquicias dentales

Ene 02 de 2018 0
Actualidad en España

En los últimos años, las grandes ciudades se han llenado de cadenas de marcas y franquicias dentales. Es el caso de, por ejemplo, lugares como Madrid o Barcelona. Este tipo de negocios consiguen registrar un alto crecimiento y suponen en muchos casos una amenaza para las clínicas dentales locales. Ante esta situación muchos prefieren recurrir, sin embargo, a clínicas dentales locales como la Clínica dental Marín García por el trato y la seguridad que les aportan.

Según un estudio en el que se analiza la situación de este tipo de cadenas de marcas y franquicias dentales, su volumen de negocio ascendió durante el año pasado a más de mil millones de euros, lo que supuso un incremento interanual del 13,4%, respecto a 2015. Parte de este crecimiento se debe a un proceso de expansión muy importante de los principales operadores.

Por su parte, las clínicas dentales locales, las de “toda la vida”, revindican su lugar en el sector y ponen en valor la calidad de sus servicios frente a la de las franquicias, consideradas un “low cost”, lo que a veces se traduce por un coste inferior al de otras clínicas, pero no siempre efectivas sobre el medio y largo plazo.

Algunos profesionales del sector advierten que, para conseguir estos precios, tan competitivos, los nuevos empresarios que dirigen clínicas dentales no solo precarizan a los propios dentistas que contratan, sino que además es frecuente que utilicen materiales de menor calidad e incluso cierta tecnología sanitaria que no respecta los estándares mínimos establecidos.

En medio de este debate algunos profesionales del sector de la Odontología han querido resaltar la necesidad que esta tiene como papel fundamental el ser una ciencia médica tan importante como las demás. Un aspecto que creen se ha olvidado en los últimos años coincidiendo con la “mercantilización” que experimenta el sector en el que se le intentan vender al cliente ofertas y descuentos en los que la salud es un bien de consumo y no un valor.

A difundir esta concepción de la salud dental ayudan sin duda algunas estrategias publicitarias. Tanto es así que la Organización Colegial de Dentistas ha manifestado su oposición a la que llaman “publicidad agresiva” y, en muchas ocasiones, engañosa que se realiza desde ciertas clínicas, franquicias y cadenas marquistas, propiedad bien de empresarios que nada tienen que ver con la profesión de odontólogo, bien de profesionales. Llaman la atención además sobre la peligrosidad de tratar desde criterios economicistas una rama del campo sanitario, de gran importancia en la sociedad.

De hecho, esa peligrosidad de la que hablan ya se ha dejado notar este año. Al menos dos clínicas han sido sancionadas, una de ellas por la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid, por incumplir el deber de veracidad informativa y publicitaria, así como por incumplir las normas reguladoras en materia de precios. Ambas clínicas habían sido denunciadas por el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de la I región (COEM), un organismo muy concienciado con la lucha por establecer un marco de regulación en el ámbito de la publicidad sanitaria que permita garantizar la salud y el cuidado de los pacientes.

Fuente: diariocritico.com

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