Resumen

Antecedentes

Este estudio de campo exploró los planes de tratamiento de dentistas generales en respuesta a la solicitud de servicios cosméticos de un paciente estandarizado no anunciado (USP) en Mashhad, Irán.
Métodos

La investigadora, como USP, visitó 24 y 23 consultorios en un área de altos ingresos y un área de bajos ingresos, respectivamente. La queja principal fue que, según los comentarios de su amiga, una estudiante de odontología, su sonrisa estaba "torcida y amarilla" debido a la falta congénita del diente número 10 y el diente número 8 con forma de clavija. Se registraron los planes de tratamiento de los dentistas para el color y la forma de los dientes y los gastos de servicios cosméticos. Se compararon los planes de tratamiento de las dos áreas. Resultados

En cuanto a la forma dental, la mayoría de los planes de tratamiento de los dentistas se categorizaron como "Sin intervención" (área privilegiada: 37,5 %, área menos privilegiada: 56,53 % y total: 46,80 %). El porcentaje de dentistas en el área privilegiada que prescribieron servicios cosméticos fue el doble que en el área menos privilegiada (33,33 % versus 17,39 %). La intervención para la forma dental varió desde la colocación de 1 unidad de carilla de composite hasta 10 unidades de laminados cerámicos u ortodoncia con una amplia gama de costos de tratamiento ($42,09 a $1079,14). En cuanto al color de los dientes, la mayoría de los dentistas (área privilegiada: 62,50 %, área menos privilegiada: 30,43 % y total: 46,80 %) se categorizaron como "Intervencionistas". En cuanto al color de los dientes, los planes de tratamiento variaban desde raspado y alisado radicular, blanqueamiento y carillas de composite con distintos costos (de $7,19 a $197,84).
Conclusión

Los planes de tratamiento estético y los gastos variaban significativamente para una única USP, y muchos no se alineaban con el plan de tratamiento estándar. Algunos dentistas ofrecían tratamientos incluso sin que el paciente presentara una queja principal. Los dentistas de áreas privilegiadas tenían el doble de probabilidades de prescribir tratamientos estéticos en comparación con los de áreas menos privilegiadas. Por lo tanto, los servicios estéticos requieren seguimiento, establecimiento de criterios de diagnóstico claros e implementación de intervenciones educativas.