Las tecnologías digitales aumentan la seguridad en los tratamientos dentales

La implementación de protocolos de seguridad y prevención en los centros sanitarios es fundamental para incrementar las medidas de higiene y protección que eviten el contagio y la propagación de la COVID-19. Se puede decir que las clínicas dentales son los centros sanitarios en los que, dada la experiencia acumulada para prevenir el contagio de enfermedades infectocontagiosas como el VIH y la Hepatitis, con mayor incidencia y agilidad se han implementado. Una seguridad fuera de toda duda que, además, se ve reforzada por las tecnologías digitales que se han ido incorporando a estos centros y que evitan el contacto con materiales y equipamiento que podrían suponer una vía de contagio.

Ventajas para el paciente y el profesional

La incorporación de las nuevas tecnologías digitales al sector dental conlleva unas ventajas innegables de las que se benefician tanto los pacientes como los profesionales. Hablamos de tecnologías clave para lo que se denomina “flujo digital” o sistema digital de trabajo de clínicas, de laboratorios o entre clínicas y laboratorios. Entre ellas el TAC dental, las impresoras 3D o los escáneres intraorales, imprescindibles para la tecnología CAD-CAM o para técnicas como la cirugía guiada en los tratamientos de implantología.

De hecho, gracias a la tecnología CAD-CAM se ha acelerado enormemente el proceso de fabricación y la precisión de la fabricación de prótesis dentales, no en vano la adaptación de los laboratorios dentales a la tecnología digital va un paso por delante a la de las clínicas. En cualquier caso, estas últimas continúan incorporando la tecnología digital a su equipamiento, ofreciendo de esta forma exámenes y tratamientos más rápidos y precisos. Conscientes de ello, los pacientes prefieren clínicas dentales que cuenten con equipamiento de última generación.

La revolución de los escáneres intraorales e impresoras 3D

De toda la tecnología digital, escáneres intraorales e impresoras 3D son los que están empujando esta “revolución digital” del sector dental. Un escáner intraoral permite realizar impresiones digitales en 3D de la boca de un paciente, y se utiliza en múltiples tratamientos como los de ortodoncia, implantología o estética dental, evitando de esta forma la utilización de los moldes de pasta que se utilizaban para obtener esas impresiones, ganando de esta forma en seguridad y precisión.

Es evidente que su incorporación supone un esfuerzo inversor por parte de las clínicas dentales. Un esfuerzo que, tal como se señala en el artículo “Inversión y rentabilidad en digital” publicado por la revista Maxillaris, todavía no se sabe con exactitud -a falta de estudios financieros que lo cuantifiquen de manera precisa- qué retorno económico tendrá.

En cualquier caso, algunos expertos aseguran -tal como se indica en el artículo- “que la introducción de la tecnología digital supone una reducción en el tiempo de los procesos, en la repetición de pruebas, en el número de visitas y en los recursos utilizados, lo que implica un ahorro directo para la clínica”.

Inversión y rentabilidad

En la actualidad, el mercado de las tecnologías CAD-CAM en España (que incluye tecnologías de fresado para laboratorios y clínicas, hornos de sinterización, escáneres de mesa e intraorales, softwares, etc.) supera los 25 millones de euros con una tasa de crecimiento del 30%, según el informe que anualmente realiza la consultora Key-Stone para Fenin, la patronal del sector.

Y como hemos comentado al inicio, en el desarrollo del mercado cobran especial importancia los escáneres intraorales. De hecho, un estudio realizado por Flash Equipment marcaba para 2019 unas ventas de 1.500 unidades (entre un 8 y un 10% más), el doble que dos años antes. Un crecimiento importante, pero que todavía supone que únicamente el 10% de las clínicas dentales españolas cuentan con esta tecnología. Eso sí, las previsiones apuntaban antes de la pandemia a que en el plazo de 3-4 años el 50% de las clínicas estarían equipadas con escáneres intraorales.

Según comenta en el artículo Eva Barranco, experta en análisis financiero de clínicas dentales, el perfil de clínica dental que está invirtiendo actualmente en tecnología digital, y concretamente en escáneres intraorales, es el un centro “con dos o tres gabinetes que ofrece todas las especialidades, incluyendo ortodoncia e implantología. Clínicas en los que hay un equipo de especialistas y que tienen una facturación media a partir de 35.000 a 45.000 euros al mes. También hay clínicas que están por debajo de estas cifras, pero responden a unos perfiles muy innovadores”.

Formación

Al margen del desembolso económico que conlleva la incorporación de un escáner digital (u otra tecnología digital), los principales motivos que pueden frenar a tomar esa decisión son fundamentalmente dos: la obsolescencia de la tecnología (relacionada directamente con la amortización de la inversión) y la formación.

Según el informe, “la tecnología avanza mucho más rápido que la formación de los profesionales y esto empieza a ser un problema”. De hecho, los datos indican que un 22% de los usuarios de tecnologías digitales en laboratorios no se muestra cómodo con ellas, mientras que en el caso de las clínicas ese porcentaje se eleva hasta el 38%.

Fuente: GMI España