¿Por qué someternos a un tratamiento de ortodoncia?

May 20 de 2020 0

La ortodoncia y la implantología son dos de los tratamientos dentales más demandados en los últimos años, tanto por estética como por funcionalidad y salud. Los implantes dentales porque son la mejor alternativa para sustituir los dientes perdidos, y la ortodoncia porque es el tratamiento más extendido para realizar correcciones en la colocación de los dientes.

Con respecto a la ortodoncia, el motivo principal para demandar este tratamiento -por el que visitan al dentista uno de cada cuatro españoles, el 29%- es la estética, según un estudio de Salud Bucodental realizado por Sanitas. A ello ha contribuido la evolución que ha experimentado este tipo de tratamiento en los últimos tiempos y con la irrupción de los alineadores invisibles, opción preferida por el 14% de los pacientes.

En líneas generales, la ortodoncia se utiliza para resolver problemas de mordida, y es el ortodoncista quien diagnostica al paciente si realmente lo necesita, el tipo de tratamiento y si debe acompañarse de extracción de piezas o intervención quirúrgica. La duración media más habitual de un tratamiento de ortodoncia es de entre 8 y 12 meses, en caso de apiñamiento o maloclusiones, y de hasta tres años para correcciones graves. Duración que puede variar en función de factores como el problema a tratar o la edad.

Existen dos tipos de tratamientos de ortodoncia, interceptivos y correctivos. Los interceptivos son preventivos y están enfocados a corregir malos hábitos cuando los dientes aún se encuentran en desarrollo. Por su parte, los correctivos están indicados para problemas de maloclusión consolidados. En este último caso, el tratamiento pasa por la colocación de un aparato, que puede ser de tres tipos:

– Funcional. Este tipo de aparatos suelen usarse básicamente durante la dentición mixta. Están diseñados para alterar la posición de los músculos e influir sobre la función y posición de la mandíbula.

– Removible. Son aparatos de corrección, sujetos de manera firme a las encías pero que pueden ser extraídos para su limpieza, que aplican fuerza controlada sobre las zonas específicas que se desean desplazar mediante el uso de resortes, arcos, tornillos, etc.

– Fija. Se realiza con elementos que se adhieren a los dientes (bandas y brackets) que sostienen un arco que se encargan de fijar los desplazamientos necesarios para conseguir el objetivo.

Fuente: globalimplants.es

Comparte esta noticia



Últimas Noticias

0 Comentarios

Para comentar debes haber iniciado sesión

Iniciar sesión